El mercado de fichajes entra en su recta final y, con él, el culebrón de los últimos veranos. El futuro de Kylian Mbappé se resolverá, de cara al próximo curso, en los próximos 30 días. Son los que faltan hasta que se cierre la ventana estival, que finaliza la noche del 31 de agosto. Hasta entonces, el Real Madrid tratará de convencer al París Saint-Germain de que acceda a vender a su estrella, que se encuentra en el último año de contrato y no tiene intención de renovar. Si no lo consiguen, el fichaje del francés deberá esperar al próximo verano, cuando podría llegar libre.
Mbappé es el principal y único objetivo del conjunto blanco en este mercado. Los madridistas incorporaron a David Alaba al finalizar el curso, tras finalizar su contrato con el Bayern y llegar libre, y ahora trabajan en la llegada del delantero francés, con el que buscan dar un golpe de autoridad e iniciar una nueva y prometedora etapa en la historia del club.
Sin embargo, no será nada sencillo. El reloj corre en contra de la directiva del Real Madrid, que deberán convencer al PSG. Por el momento, el club galo se resiste a vender a su estrella, confiando en alcanzar un acuerdo de renovación en los próximos meses. Los blancos tienen la palabra del jugador y su entorno de que no lo hará.
Por ello, si el fichaje del jugador no se cierra a lo largo de este mes de agosto, se dará carpetazo al capítulo del eterno culebrón, aunque de manera momentánea. En enero, si como todo apunta, Mbappé sigue dando largas al conjunto parisino, los madridistas tendrán vía libre para cerrar su incorporación para el verano de 2022, sin depender ya de la voluntad de Al-Khelaifi y del jeque.
Fuera de la primera convocatoria del PSG
La principal novedad en la primera convocatoria oficial del PSG de la presente temporada es la ausencia de Kylian Mbappé. Los parisinos afrontarán la Supercopa ante el Lille sin el jugador, que se ha quedado en la capital gala para llegar al cien por cien para el estreno liguero de la próxima semana.
Sin embargo, su ausencia ha hecho saltar las alarmas. Mbappé no ha viajado, tras haberse reincorporado a la pretemporada a la vez que su compañero de selección Kimpembe y Wijnaldum, que si que han formado parte de la expedición de Pochettino para jugarse el primer título del curso. En el aire quedan por tanto los motivos reales de su baja.
Convencerle con un equipo ganador
Los planes del PSG para convencer al jugador no pueden ser mejores. Las medidas anti-Superliga tomadas por la UEFA de Aleksander Ceferin han permitido al club formar un equipo de ensueño, con el que se permiten aspirar a todo. De esta forma, se trata de hacer ver a Mbappé que puede firmar una de las grandes páginas de la historia del fútbol europeo y así atarle más allá de la presente temporada.
En el caso de que el atacante se quede esta temporada en el Parque de los Príncipes, aspirará a lograr uno de sus sueños, el de levantar la Champions. Sin embargo, en el Real Madrid siguen confiando en su palabra de que no renovará y, por el momento, el jugador se mantiene firme ante las presiones. No quiere renovar y así se lo habría comunicado a Pochettino, pero tampoco salir mal parado del club, por lo que si el PSG no cede a traspasarle este verano, esperará hasta que quede libre en 2022.